
Características físicas del manatee
De forma general, el manatí es un animal muy corpulento, llegando a medir entre 3 y 4 metros, y pudiendo alcanzar los 500 kg, incluso algo más. El tamaño de su cabeza, al igual que su cerebro y ojos, en relación al cuerpo es muy pequeño, sin embargo, son hábiles e inteligentes como los delfines. Tienen dos extremidades anteriores, aletas aplanadas, y una cola en forma de espátula, muy característica de esta especie.
Su piel es gruesa, de color gris y tienen una visión muy limitada, aunque su sistema auditivo está muy desarrollado. También poseen un avanzado sentido del tacto, gracias a que su cuerpo está cubierto de vibrisas (pelos rígidos que actúan como receptores táctiles).
A diferencia de los demás mamíferos, solo tienen 6 vértebras en el cuello, por lo que deben girar todo el cuerpo para poder mover la cabeza. Son capaces de aguantar hasta 20 minutos sin salir a respirar.
Estas vacas marinas se cree que evolucionaron a partir de mamíferos terrestres de 4 patas hace más de 60 millones de años. A excepción del trichechus inungis, sus aletas tienen rastro de uñas de pies. Se piensa que el elefante es el pariente terrestre más cercano al manatí.