
Cómo es la salamanquesa común
La salamandra común es un pequeño reptil, de unos 19 cm, que se ha adaptado a la perfección a los entornos urbanos de los países mediterráneos. Se las puede ver contradecir las leyes de la gravedad en las paredes de pueblos y ciudades, cerca de luces donde se acercan los insectos. Su aspecto es robusto, con el cuerpo y la cabeza deprimida, tanto ventral como dorsalmente.
Dorsalmente, en las patas y en la cola se observa unas pequeñas protuberancias con forma cónica que le dan un aspecto rugoso. Las patas, por su parte, son cortas y robustas. Los dedos son anchos en el extremo, presentando unas laminillas en su cara interna que es la adaptación que le permite moverse por superficies verticales o boca abajo en los techos.
Solo tiene uñas en los dedos tercero y cuatro de cada pata. Su color es gris pardo o marrón, con manchas claras y oscuras. La coloración puede variar en intensidad según la luz que reciben, desde tonos muy oscuros durante el día hasta otros más claros por la noche.
Su pupila es vertical cuando se contrae, si se les molesta pueden perder la cola como sistema de defensa y, aunque les vuelve a crecer, no lo hará con el mismo tamaño que la original. Debemos ser muy cuidadosos con ellas, ya que se ponen nerviosas en nuestra presencia, son muy frágiles y pueden lastimarse con facilidad.
En mi casa de campo hay salamanquesas y me preocupa porque solo voy los fines de semana y cuando regreso encuentro sus abundantes heces en el piso y por otros lugares como mesas Y sillas
Tienes suerte de tener esos animales en casa. Sus heces son un mal menor para todo el beneficio que aportan. Gracias por tu comentario