Nadie puede dudar a estas alturas que las calles de las grandes ciudades están siendo adueñadas por los patinetes eléctricos. Sus ventajas están claras, menor gasto económico, menos contaminación, ruido cero, libre de atascos… Aunque, como cualquier otro aparato tecnológico con piezas móviles y eléctrico, va a requerir de algunos cuidados y de cierto mantenimiento.
Saber donde arreglar pinchazo patinete eléctrico o cómo limpiar las piezas de esta máquina es parte de la información que se debe poseer. Conocer el mantenimiento que necesita resulta fundamental para que esté siempre disponible, en buen estado de uso y pueda durarnos muchos años.
Este medio de transporte ecológico ha llevado a un crecimiento exponencial en su utilización en los últimos años, del orden del 1.000 % en relación a sus ventas. Tal ha sido la invasión en las calles de las ciudades que el gobierno ha tenido que aprobar un Real Decreto para regular su uso casi con urgencia. Los patinetes eléctricos han comenzado a ser una herramienta más para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, pero es importante adquirir los conocimientos necesarios para hacer un buen uso de ellos, así como de llevar a cabo constantes cuidados.
Estas son las principales acciones que hay que acometer para su mantenimiento.
1. Sobre sus ruedas
Fundamental como en cualquier otro vehículo que vaya sobre el asfalto. Este elemento es el que garantiza la adhesión a la calzada, por lo que deberán tener siempre la presión adecuada si llevan cámara (no todos los modelos la llevan). Por otro lado, cada vez que se utilice habrá que hacer una revisión visual sobre el aspecto que presenta. No deberá estar desgastado o presentar bultos. Según sea el modelo de patinete eléctrico, el fabricante recomendará el tamaño del neumático. Por regla general, para mejorar su amortiguación serán más anchos y para los pavimentos lisos se aconsejarán los más estrechos.
2. De las baterías
Un segundo control elemental de gran importancia es el que se debe aplicar a las baterías. En este sentido, como ocurre con cualquier otra, no deberá agotarse completamente antes de volver a iniciar su carga. Tiene que ser una de las piezas a la que más atención se le otorgue a la hora de adquirir un patinete eléctrico, ya que de ella va a depender la autonomía.
En cualquier caso, siempre habrá que utilizar una batería según la marca y el modelo del patinete, que esté, además, homologada. Jamás se deberá mojar, no habrá que desmontarla por dentro, no se deberá cargar estando caliente y aunque no se esté usando, también habrá que cargarla periódicamente, evitando que se descargue por completo.
3. El motor de un patinete eléctrico
Como norma general, aunque existen dos tipos de motores eléctricos para patinetes eléctricos (con o sin escobillas), se deberán aplicar los siguientes cuidados.
Con el motor apagado limpiar la superficie exterior, y el interior con aire seco. Comprobar que están en perfecto estado las conexiones eléctricas y devanados. Revisar si existen rastros de humedad, aceite o grasa en el devanado. También se deberá medir la resistencia en aislamiento y la conexión a tierra, así como la carga en el arranque. Por otro lado, también habrá que asegurarse de que no tiene ninguna varilla rota y revisar el estado de los tornillos, uno a uno, el estado de la carcasa, la ventilación, los amarres…
Con el motor en marcha, habrá que asegurarse de que mantiene una buena ventilación y no sufre sobrecalentamientos, que no se oigan ruidos extraños, no lleguen olores a quemado ni se observe un exceso de vibraciones.
4. La correa de transmisión
Esta cadena o correa debe mantener una tensión correcta para garantizar la transmisión de potencia adecuada. Como recomendación general tiene que existir un centímetro de movimiento al poner el dedo, porque si está demasiado tensa podría llegar a romperse. Así mismo, con cierta periodicidad se deberá engrasar esta correa para que el movimiento siga siendo el correcto.
5. Los frenos de un patinete eléctrico
También habrá que aplicar una vigilancia constante sobre el estado de estas piezas, comprobando que funciona perfectamente. Con pequeñas y continuadas frenadas, se podrá apreciar su labor. En cualquier caso, para los frenos mecánicos se aconseja ajustar las pastillas cada 150 km, aproximadamente, y cambiarlas cada 700 km. Los frenos hidráulicos no requieren ajuste alguno, pero su cambio también es recomendable a los mismos kilómetros.
6. Últimas recomendaciones
Aunque mantengamos el control y cierta vigilancia sobre las piezas mencionadas, a la hora de cambiarlas es mejor acudir a un taller patinete eléctrico especializado. Sobre todo si no se cuenta con los suficientes conocimientos y experiencia o no tenemos las herramientas apropiadas, solo un experto podrá llevar a cabo este mantenimiento correctamente.
En cualquier caso, no hay que olvidar nunca reponer las piezas con los componentes originales de la marca. En relación a la limpieza, no se debe usar alcohol o blanqueadores ni tampoco agua a presión, lo mejor será utilizar un trapo húmedo sin tocar las zonas eléctricas.
Por último, hay que saber que está prohibido por ley realizar trucajes sobre el comportamiento del patinete eléctrico (velocidad y potencia). Nunca podrá superar los 25 km/de velocidad.