El entrenamiento personal y la naturaleza están cada vez más unidos. La tendencia en el desarrollo fitness es utilizar los espacios abiertos de parques, bosques, playas, riveras de los ríos, montañas… para llevar a cabo los entrenos que habitualmente se realizan en los gimnasios. El entrenador personal que utiliza los entornos naturales como lugar de entrenamiento ofrece un plus, una fórmula más agradable, eficiente y saludable.
Al elegir esta opción para optimizar el rendimiento físico, volverse más fuerte, ágil y sano, el programa de entrenamiento se abre a un sinfín de posibilidades. El deportista podrá caminar, correr, saltar, pero también escalar, remar, coger la bicicleta de montaña, hacer yoga al aire libre, respirando en el ambiente puro que proporcionan las plantas.
El entrenador personal J. González de JG fitness Tres Cantos ya incorpora sesiones de entrenamientos que combinan los espacios abiertos con las instalaciones de sus propios gimnasios e incluso clases online de fitness, para optimizar el tiempo dedicado al ejercicio. De este modo, complementa actividades en exteriores, que hacen más divertida y efectiva la estrategia deportiva elegida, con los tradicionales en máquinas en los centros de entrenamiento especializados. Un tipo de entreno que ofrece, al mismo tiempo, una oportunidad para conectarse con la naturaleza, beneficiando directamente y en la misma proporción al cuerpo, a la mente y al espíritu.
El motivo por el que es tendencia en el mundo del entrenamiento físico no es otro que el de proporcionar experiencias de entrenamiento más emocionantes, vistosas y vivas para los sentidos. Todo aquel que busca nuevos desafíos y cambiar el ambiente cotidiano de las rutinas de sus ejercicios encuentra en este sistema una respuesta inmejorable para sentirse más activo.
El entrenador, por su parte, debe ser capaz de encontrar la perfecta combinación entre interior y exterior al diseñar sus programas. Se deberán adaptar a las condiciones climáticas y utilizar los distintos tipos de terreno y entornos para lograr los objetivos.
El trabajo de un entrenador personal
Los deportistas aficionados y los profesionales se ponen de acuerdo en designar el trabajo de un entrenador personal como la mejor forma de alcanzar los objetivos dispuestos en relación a la formación física. El profesional del fitness está preparado para cumplir la función de asesorar y orientar de forma personalizada a las personas que están a su cargo, ayudándolos a obtener los resultados que esperan y desean tener con el entrenamiento.
Este tipo de entrenador evaluará la condición física y desarrollará un plan o programa de entrenamiento completamente adaptado a cada persona. En este proyecto de formación física se incluirán tanto los ejercicios como los tiempos para llevarlos a cabo y la nutrición más adecuada. A medida que el cliente vaya progresando, siempre bajo su supervisión, implementará y/o ajustará nuevos mecanismos para optimizar sus avances.
Por otro lado, además de tener la suficiente capacitación para asesorar y orientar en relación a sus ejercicios físicos y alimentación, también deberán saber cómo brindar el apoyo y la motivación necesaria. En este sentido, saber estimular al deportista es fundamental para que este no se rinda, decaiga el interés o su capacidad de superación.
Fitness y naturaleza, una relación bien avenida
Está suficientemente demostrado que llevar el fitness a un entorno natural tiene mucha más repercusión y ofrece más beneficios que si se realiza en un lugar cerrado. Aunque, lo correcto, es realizar cada tipo de ejercicio en el lugar más aconsejado para ello, al practicarlo al aire libre y rodeado de naturaleza se recibirán los siguientes beneficios de forma más directa.
1. Aumenta la quema de calorías
Especialmente en terrenos irregulares, como la subida a montañas o el recorrido de senderos de tierra, se requiere más esfuerzo físico que en el ejercicio en interiores. Como cabe suponer, se da una mayor quema de calorías y, como consecuencia, una mayor y más rápida pérdida de peso.
2. Con el entrenamiento personal y un entorno saludable di adiós al estrés
Sin ejercitarse, estar en la naturaleza y alejarse de las prisas y del bullicio de la vida cotidiana ayuda a reducir el estrés y mejora notablemente el estado de ánimo. Si, además, se llevan a cabo los ejercicios físicos programados por un entrenador personal que tiene en cuenta este objetivo, se podrá dar, sin temor a dudas, un adiós definitivo a este problema psicológico tan habitual en el siglo XXI.
3. Hola a la vitamina D
Al recibir los rayos del sol ejercitándose en el bosque o en la playa, aumentará de forma natural la producción de la beneficiosa vitamina D. Un elemento vital para el buen funcionamiento y la salud de los huesos y de la piel, pero también para mejorar el estado de ánimo. Con un buen entrenamiento personal eligiendo entornos hermosos y llenos de vida natural, recibiendo luz solar el efecto será realmetne enriquecedor a nivel orgánico.
4. Se potencia la salud cardiovascular
El ejercicio al aire libre suele ser más variado que aquel que se realiza en los gimnasios a puerta cerrada. En este sentido, y con la misma lógica que el aumento de la pérdida de calorías, ha quedado suficientemente demostrado que ayuda mucho más a la salud cardiovascular. Esto ocurre, en buena medida por enfrentarse a terrenos irregulares, desafiantes, que obligan a cambiar los ritmos y a estar más atentos al ejercicio. Todo se vuelve más orgánico, es decir, menos mecánico, y esto es bueno para el corazón.
5. El entrenamiento personal en la naturaleza también aumenta la motivación
Por último, otra de las realidades de hacer ejercicio en la naturaleza
es que ofrece una mayor motivación que el que se presenta en un ambiente interior, más monótono y aburrido. La belleza natural y la variedad de paisajes logran que el ejercicio sea más emocionante y divertido.
En definitiva;
La naturaleza es una fuente importante y constante de inspiración. Así mismo, los recursos que ofrece para la actividad física y el fitness son ilimitados. No son pocos los deportistas, cada vez más, que eligen hacer ejercicio al aire libre, ya sea caminar, correr, hacer senderismo o alguna de sus rutinas habituales y aprovechar la belleza y tranquilidad que se presenta en la naturaleza.
Por otro lado, algunos de los programas de fitness y entrenamientos más eficaces, como es el entrenamiento funcional, están basados en los movimientos naturales del cuerpo, así como en el uso de elementos que imita acciones y trabajos físicos que se hacen en la naturaleza. Ejemplo de esto es el levantamiento de troncos, empujar rocas o subir escalones. Son ejercicios muy básicos, que hacen aumentar la fuerza, la coordinación y la movilidad. Al mismo tiempo que proporcionan una conexión con la naturaleza que abre la mente y despierta los sentidos.
Queda claro pues que la naturaleza y el fitness pueden complementarse mutuamente para brindar una experiencia de entrenamiento más completa y gratificante.