En los últimos años, la kombucha ha ganado popularidad, no solo como una bebida saludable, sino también como un aliado en la sostenibilidad ambiental. Pero, ¿qué es exactamente la kombucha y por qué deberías incluirla en tu rutina diaria? A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre esta bebida fermentada que está revolucionando tanto el mundo del bienestar como el del cuidado del planeta.
Orígenes de la Kombucha
La kombucha no es en absoluto moderna, sus orígenes se remontan a más de 2,000 años atrás en Asia. Se cree que se originó en China, específicamente durante la dinastía Qin (alrededor del 221 a.C.), donde se le conocía como el “té de la inmortalidad” debido a sus supuestas propiedades rejuvenecedoras. Desde China, la bebida se extendió a otras regiones de Asia y Europa del Este, ganando popularidad por sus efectos positivos en la salud.
Con el paso de los años, las kombuchas han mantenido su relevancia y ha resurgido en el mundo occidental gracias al creciente interés por la alimentación saludable y la fermentación de alimentos.
¿Qué es la Kombucha?
Se trata de una bebida probiótica que se obtiene a través de la fermentación del té, azúcar y una colonia simbiótica de bacterias y levaduras, también conocida como SCOBY. Este proceso de fermentación produce una bebida ligeramente ácida y carbonatada, rica en nutrientes y compuestos beneficiosos para la salud.
Sus ingredientes clave son el té (verde o negro), SCOBY (colonia de bacterias y levaduras), azúcar y agua. Se trata de una bebida que, además de ser refrescante y deliciosa, es conocida por sus múltiples beneficios para el organismo.
Beneficios para la Salud de la Kombucha
El consumo regular de este producto natural contribuirá de forma notable en las siguientes actividades del cuerpo humano
Mejora la digestión
Gracias a su contenido de probióticos, la kombucha favorece la salud intestinal y promueve una buena digestión.
Fortalece el sistema inmunológico
Los antioxidantes presentes en el té verde o negro utilizado en su elaboración ayudan a combatir los radicales libres y refuerzan las defensas naturales del cuerpo.
Aporta energía
El ácido glucónico y las enzimas presentes en esta bebida incrementan los niveles de energía de manera natural.
Desintoxica el organismo
Los ácidos orgánicos presentes ayudan a eliminar toxinas y a mantener el hígado saludable.
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Kombucha y Sostenibilidad: Un Aliado del Medio Ambiente
Además de sus beneficios para la salud, la kombucha es una excelente opción para quienes buscan reducir su impacto ambiental. Aquí te explicamos por qué:
Reducir el uso de botellas de plástico
La kombucha se puede preparar en casa y almacenar en botellas reutilizables, lo que disminuye la cantidad de plásticos desechables que terminan contaminando el medio ambiente. Hasa que procesos de recuperación y biodegradación del plástico no evolucionen y se implanten en los procesos productivos, cualquier acción para reducir estos residuos debe utilizarse.
Residuos mínimos
Los ingredientes para hacer kombucha son simples y naturales, generando menos residuos y minimizando la huella de carbono de su producción.
Valorización de los residuos orgánicos
Al preparar kombucha casera, el exceso de SCOBY o los residuos del té pueden compostarse, aportando nutrientes al suelo y cerrando el ciclo de producción.
Bebida fermentada y artesanal
La kombucha promueve la creación de productos artesanales y locales, lo que favorece el consumo responsable y la reducción del transporte, una de las principales fuentes de emisiones de CO2.
Cómo Consumir Kombucha
Es versátil y puede disfrutarse de diversas maneras, estas que se presentan a continuación son las formas más habituales de consumirla:
Solamente como bebida
De forma general se disfruta mejor fría y puede beberse sola a cualquier hora del día. Su sabor ligeramente ácido y efervescente la convierte en una excelente alternativa a los refrescos comerciales.
Como ingrediente en smoothies
Añadida a los batidos matutinos para darles un toque probiótico y mejorar tu digestión.
Infusionada con frutas y hierbas
También es posible personalizarla añadiendo frutas frescas, como frambuesas o rodajas de limón, y hierbas como la menta o albahaca durante la segunda fermentación. Esto le añadirá nuevos sabores y potenciará sus propiedades antioxidantes.
Antes o después de las comidas
Beber kombucha antes de comer puede estimular la producción de enzimas digestivas, mientras que después de las comidas puede ayudarte a sentirte menos hinchado.
Recuerda que, aunque es un cóctel que ofrece muchos beneficios, es importante no consumirla en exceso. La recomendación general es limitarse a uno o dos vasos al día para aprovechar sus propiedades sin sobrecargar el sistema digestivo.
Cómo Preparar Kombucha en Casa
Producir este refresco en casa no solo es sencillo, sino también una forma eficaz de contribuir a un estilo de vida más sostenible. Aquí te dejamos los pasos básicos para que lo intentes:
Hervir agua y agregar té (usa tu té preferido (verde o negro) y endúlzalo con azúcar), enfriar y añadir el SCOBY (una vez que el té esté a temperatura ambiente, añade la colonia de bacterias y levaduras), dejar fermentar cubriendo el recipiente con un paño la mezcla a temperatura ambiente durante 7 a 14 días), envasar y consumir (embotellar en recipientes de vidrio reutilizables y refrigerar).