Conocer los diferentes tipos de simbiosis, así como qué significa este fenómeno tan interesante en el mundo natural, supone entender el concepto básico de que la colaboración es más productiva que la competición. Este proceso, como cabe suponer, se da cuando dos especies diferentes interactúan entre sí de manera provechosa para ambas.
A menudo, las relaciones simbióticas son mutualistas, lo que significa que ambos géneros se lucran de este vínculo. Sin embargo, también están las llamadas parásitas, en las que una de ellas se beneficia a expensas de la otra. A lo largo de la historia de la vida en la Tierra, ha habido muchos ejemplos de este fenómeno, desde las hormigas junto con las plantas de acacia, hasta los peces payaso con las anémonas, siendo este uno de los más admirados por la comunidad científica.
Simbiosis es un término que proviene del griego y significa “medios de subsistencia” y hace referencia a las asociaciones que establecen los individuos de un ecosistema para compartir o competir por recursos de la naturaleza. Es indispensable para la supervivencia de los seres vivos, ya que fomentan la evolución de los mismos.
Mutualismo, parasitismo y comensalismo: los diferentes tipos de simbiosis que se dan en la materia viva
La convivencia entre organismos es imprescindible para su supervivencia. Se observan diferentes tipos de simbiosis que a continuación se describen.