No se puede dudar de que el color de las flores alegra los sentidos, que es una de las tantas cosas que nos ofrece la naturaleza para disfrutar de su variedad y que nos permite asombrarnos de su capacidad para representar de tantas formas la belleza.
El color es una característica muy representativa de las flores. Un factor que se debe a ciertas sustancias llamadas pigmentos. Elementos que están en las moléculas de las plantas, agrupándose fundamentalmente en los pétalos. Las flores, al igual que los humanos, reciben su apariencia a través de los genes.
Según Wikipedia, la función de una flor es producir semillas a través de la reproducción sexual. Para las plantas, las semillas son la próxima generación y sirven como el principal medio a través del cual las especies se perpetúan y se propagan. El color de las flores estaría directamente relacionado con la función reproductiva de la planta.
¿Por qué tienen las flores colores diferentes?
Como anteriormente se ha comentado, el color de las flores se debe a unas sustancias naturales llamadas pigmentos, éstos se encuentran en los genes de cada planta. Por ejemplo, si una planta es de un color en concreto, las hijas de esta planta tendrán ese mismo pigmento y, por lo tanto, ese mismo color.
La clorofila es la sustancia o pigmento que da color a las partes verdes de las plantas, es decir, a los tallos, ramas y hojas. Aunque no es la única, otras sustancias que dan color a las plantas pueden ser:
- Los carotenoides, son pigmentos de color amarillo (encontrándose en frutas y verduras), naranja (lo podemos ver en las zanahorias) o rojo (responsable del color que tienen los tomates).
- Las antocianinas, apreciables en los pétalos de las flores, su gama de colores puede ser azul, rojo, púrpura, rosa, morado, lila o el malva.
- Las betalaínas, estos también pueden ser de color amarillo (estando en el amaranto o en los cactus) o rojos (color característico de las remolachas).
Con los pigmentos anteriores, se cubre toda la gama de color que tienen las flores. Si una flor presenta unos colores más o menos oscuros, es debido a una mayor o menor cantidad de una determinada pigmentación.
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Influencia del PH del suelo en el color de las flores
Además de los genes, las condiciones del suelo también son muy importantes para determinar el color de una flor, en concreto, su PH, es decir, va a depender de la acidez o alcalinidad del lugar donde crece la planta.
Un ejemplo de ello puede ser una planta con un PH menos ácido que el suelo donde está sembrada, cultivada o plantada, sus flores serán de un color más intenso. Una característica que se puede ver muy claramente en las hortensias, donde los colores de las flores se ven influenciados por la acidez del suelo.
Por esta razón, es muy difícil obtener flores de color azul, ya que el PH del suelo debería ser neutro, siendo un sustrato muy complicado de encontrar o conseguir.
El color de las flores para captar la atención de los polinizadores
Se puede decir que el color de las flores es una cuestión para garantizar la supervivencia de la planta. En este sentido, la acción de los polinizadores es crucial, poblaciones que están en riesgo de extinción en Europa. La UICN advierte el 37% de estos seres vivos serán seriamente amenazados, principalmente por la agricultura intensiva, el uso de pesticidas, la silvicultura comercial insostenible, el cambio climático y el imparable desarrollo urbano.
Los polinizadores son fundamentalmente artrópodos, insectos, mamíferos y pájaros.
Para las plantas, fabricar los pigmentos que les dan el color a las flores es esencial para su reproducción, ya que esta es la fórmula que utilizan para llamar la atención de los polinizadores y que capturen su polen y su néctar. De hecho, las plantas que no los necesitan, suelen carecer de colores y son poco llamativas.
De este modo, las flores generan diferentes colores para cerciorarse de acercar al tipo de polinizador que más le interesa. Por ejemplo, a uno de los más importantes que existe, la abeja, el color que más le llama la atención es el violeta, y los tonos naranjas o rojos son los más atractivos para los colibríes.
La adaptación de las flores según el color
Las plantas se adaptan a la forma de ver de las aves y los insectos, de manera que cuando éstos tengan ganas de nutrirse, relacionen los colores con su fuente de alimentación.
Los estudios realizados por un grupo de científicos en la universidad holandesa de Groningen, liderados por el científico Casper van der Kooi, así lo demuestra.
Los insectos perciben los cambios de intensidad en los colores de las flores, éstas regulan la cantidad de luz solar que reflejan y además la saturación de los pigmentos. De este modo, los polinizadores las detectan fácilmente.
Además de lo anteriormente comentado, las flores tienen otras formas de evolucionar o de adaptarse con respecto al color.
Las flores de tallo largo poseen colores en ambas caras de sus pétalos, atrayendo a los polinizadores desde cualquier posición. Las que están a nivel del suelo, solo tienen color en la parte visible de los pétalos, puesto que la otra parte no se ve, y de esta forma se reservan recursos.